jueves, 21 de octubre de 2010

Mi hermana, la que está lejos.


Escuchar verdades.

Estar harta de oír lo mismo, de oír lo que se supone que quiero oír.

Cansada de todo, de nada, de mí, de ti, de ellos, de nadie.

Cansada de luchar, de llenarme de aire fresco los pulmones para soltarlo en forma de carcajada.

Cansada de fingir, de tener que decirle a todos que estoy bien, de tener que decir que soy fuerte, ¡claro que soy fuerte!

Cansada de haber tenido que dar la cara delante de mis niñas, cuando han venido con una cara triste y yo he dicho: ¡No pasa nada! ¡Si yo estoy muy bien!

Cansada de no tener ni media hora sin que nadie...

Cansada de no poder parar de pensar en ti, cuando lo único que quiero es olvidar.

Cansada de llevar hacia arriba y hacia abajo esa flecha continuamente.

Cansada de todas esas miradas de lástima que recibo por parte de mucha, muchísima gente.

Cansada de todo, y apareces tú.



...Y entonces, vuelves.

De tu viaje infernal(no-infernal). Y abres esa conversación que me daba TANTO miedo tener.

Y la tenemos.

Y me sorprendes.

Gratamente.

Consigues hacerme llorar, pero no lloro porque pienso que doy lástima, sino porque, al fin, estoy escuchando lo que de verdad quiero oír.

"Porque eres tú, sólo tú, la que decides cuándo va a acabar toda esta mierda. Porque lo vas a pasar fatal, porque la vida es dura. Y vas a llorar. Y vas a tener ganas de pegarte cabezazos contra la pared. Y todo es así. La vida es dura, entérate. Yo no pienso decirte que que ánimo, que la vida sigue, que tires para adelante... Porque no te sirve de nada. Sólo quién ha pasado por eso te comprende, Y yo lo hago, aunque no del todo. Por eso te digo, que sufrirás, que por mucha gente que esté a tu lado, vas a sentirte sola, y como una mierda... Pero lo superarás, te repito, cuando tú, y sólo tú, quieras que esto acabe. Yo creo en el destino, y si él lo era, volverá. Y si no... La vida da muchas vueltas, quién sabe lo que tiene Él preparado para tí. Lucha por todo lo que quieres. Y da ostias sin mano, pero sólo cuando seas realmente capaz de darlas, no la cagues antes. También creo que la vida te devuelve los palos... Y quizás esto te lo merezcas por lo de... Ya sabes dónde te espero: donde encontramos la calma"

Nunca NADIE me ha hablado con tantísima sinceridad.

Gracias, hermana.

Te quiero!
...porque has conseguido que hoy, después de esa conversación de anoche, esté sentada en el suelo escribiendo esto, en un descansido de remodelar mi cuarto entero, de arriba abajo.
Ya estaba bien!

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